By - - 79 Comments

‘Deadpool’ ha resultado ser un éxito de taquilla, pero detrás de este simpático personaje se esconde una cinta llena de sexo y violencia explícita que se halla al alcance de cualquier menor de edad.

Aunque ha sido clasificada B15 en México, es decir, para mayores de 15 años, en cines de Monterrey se ha observado que niños de todas las edades tienen acceso al filme.

En un recorrido realizado por “ABC” durante el fin de semana por Cinépolis y Cinemex, se pudo constatar que aún con los “controles” que las empresas dicen tener, los cuales, cabe aclarar, no aplican, los menores acceden a las salas donde se proyecta la historia del antihéroe de Marvel.

Fuera de control

Para la tarde del sábado, a un día del estreno, los pequeños podían ver al irreverente personaje, la mayoría, acompañados de sus padres.

Diversos empleados de las cadenas de cine fueron entrevistados. Víctor Velázquez, encargado de taquilla, comentó: “Nosotros no dejamos entrar a menores, la película es B15 y si vienen menores acompañados de sus padres les decimos que es responsabilidad de ellos, si ellos acceden pues les vendemos los boletos.

“Pero sí les decimos. Cuando son muy pequeños de 5 o 6 años no los dejamos entrar”, comentó.

En Cinépolis Galerías nos explicaron que contaban con dos filtros: uno en taquilla, donde les indican que no pueden pasar menores y el segundo donde piden los boletos para entrar a la sala de cine.

Ambos “filtros” no existen como tal, pues una adolescente de 13 años pudo comprar tres boletos, llegar a la sala de proyección y ver la película sin el menor problema.

Irina Zacate, encargada de Valores de Cinépolis, aseguró: “Niños chiquitos, no. Aquí les decimos a los padres y cuando vemos que son adolescentes se los dejamos a su criterio, pero si se llegan a vender, en la otra entrada los detienen y ya no los dejan pasar, por eso les advertimos a los padres”.

Es generalizado

Esta irregularidad se presenta también en Cinemex, en donde, aunque aseguran pedir la credencial de elector a los asistentes, hay niños que ven la película.

Cabe añadir que también está el criterio de los padres, que según los empleados del cine, son ellos los que tienen la última decisión.

En China, el contenido de “Deadpool” no libró la censura y la cinta se prohibió en ese país.