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La diseñadora Christine Kendall acusó a la Casa Alexander McQueen de plagiar uno de sus diseños para el vestido de novia que usó la ahora duquesa Catalina de Cambridge.

Kendall afirma que en noviembre de 2010 le envió a Catalina varias ideas para el ajuar que luciría el 29 de abril de 2011, en su boda con el Príncipe Guillermo.

Según la modista, dos meses después le llegó una carta de parte de la oficina de los príncipes Guillermo y Enrique.

“Catalina Middleton me ha pedido que le dé las gracias por su carta del 18 de noviembre.

“A la señorita Middleton le interesó mucho su trabajo y apreció que se tomase la molestia de escribir”, se leía en la misiva, según la modista, pero en la Casa real aseguran que la mamá del príncipe Jorge nunca vio los bocetos.

En la Casa Alexander McQueen negaron que Sarah Burton, responsable del vestido de novia, haya visto los bocetos y afirman que ni siquiera conocía a Kendall.

“Sarah Burton nunca vio los diseños de Kendall, y no la conocía antes de que se pusiera en contacto con nosotros. La reclamación es ridícula”, expuso la firma en un comunicado.

Hasta ahora, el representante legal de Christine Kendall afirma que las acciones legales se emprendieron contra la firma y no contra Catalina de Cambridge; se desconoce lo que pide la demandante.